El Programa de los 177 Pueblos Mágicos de Mexico, desarrollado por la Secretaría de Turismo en colaboración con diversas instancias gubernamentales y gobiernos estatales y municipales, contribuye a revalorar a un conjunto de poblaciones del país que siempre han estado en el imaginario colectivo de la nación en su conjunto y que representan alternativas frescas y diferentes para los visitantes nacionales y extranjeros. Más que un rescate, es un reconocimiento a quienes habitan esos hermosos lugares de la geografía mexicana y han sabido guardar para todos, la riqueza cultural e histórica que encierran.

Palenque, Chiapas

Nota sobre Palenque, Chiapas
Donde la abundancia de restos arqueológicos nos descubren las líneas maestras de la cosmología maya

El verdadero nombre de la ciudad antigua de Palenque es Lakamha´, que significa “El lugar de las grandes aguas,”.

Aunque, finalmente, la zona arqueológica toma su nombre de la comunidad vecina fundada a finales del siglo XVI, Santo Domingo de Palenque. La acepción Palenque, significa “Estacada” o “Empalizada” que se refiere a un redondel de madera para proteger un sitio.

Palenque, patrimonio de la humanidad desde 1987, fue la ciudad más importante de las tierras bajas occidentales durante el periodo Clásico Tardío, y llegó a su apogeo entre los años 600 y el 800 d.

C.

A principios de 900 d.

C. entró en declive y fue devorada por la selva, hasta que en 1784 José Antonio Calderón realizó la primera exploración oficial del sitio y un año después, Antonio Bernasconi hizo un estudio más detallado de los edificios.

Palenque fue junto con Tikal y Calakmul una de las ciudades más poderosas del Clásico Maya, sede de una de las dinastías más notables a la que pertenece Pakal.

Muy bien conservada, la abundancia de restos arqueológicos, arquitectónicos, pictóricos, textos escritos, entre otros, han hecho de Palenque un lugar esencial para que los arqueólogos descifren las líneas de la escritura maya y sus relatos cosmológicos.

También desde el punto de vista monumental es un hito de esta cultura, tanto por la calidad de su arquitectura como por la originalidad de sus construcciones.

Son característicos de Palenque, por ejemplo, la buena conservación de los edificios con fachadas inclinadas en la parte superior y los tableros con relieves en estuco. Fue una de las ciudades mayas más importantes del Clásico y hoy, es una famosa zona arqueológica por su arquitectura, escultura y el nutrido grupo de inscripciones jeroglíficas que informan sobre su larga y fructífera historia.

El Templo de las Inscripciones, levantado frente al Gran Palacio, en la parte superior de una pirámide escalonada, tiene cinco entradas, algo bastante inusual en la arquitectura maya.

En realidad, se trata de un templo funerario, lleno de inscripciones que hacen honor a su nombre, con una losa horadada en su interior que conduce a uncrea escalera y ésta, a su vez, a una cámara funeraria, situada en las profundidades del edificio. El interior de la cámara mortuoria, de siete metros de altura, contiene una rica decoración y un gran sarcófago, ricamente tallado, con los restos de Pakal II o K’inich Janahb’ Pakal II (Resplandeciente Escudo Ave-Janahb’), que vivió entre los años 603 y 683 d.C., y reinó 67 años.

El Palacio, frente al Templo de las Inscripciones, más que un edificio, es un magnífico conjunto de edificios interconectados, que fueron construidos, remodelados y modificados a lo largo de cuatrocientos años, sobre una terraza artificial.

Es una de las más bellas y complejas estructuras del mundo maya, por la variedad elementos que lo conforman: corredores, basamentos escalonados, galerías subterráneas, patios, tableros con jeroglíficos y otros escultóricos, como el Oval, que muestra la entronización de Pakal junto a su madre Zac Kuk.

Contiguo al Templo de las Inscripciones, se levantan El Templo de la Calavera y el Templo de la Reina Roja, desplantados sobre una plataforma muy amplia; los dos edificios dejan ver en la cima los restos de templos, que sirvieron como tumbas de personajes relevantes de la dinastía del sitio.

El Grupo de las Cruces, está constituido por los Templos de la Cruz, del Sol y de la Cruz Foliada, tres pirámides escalonadas coronadas con templos que conmemoran el ascenso al trono, tras la muerte de Pakal el Grande, del señor Chan Bahlum II, mostrando al nuevo Señor recibiendo la grandeza de manos de su predecesor.

El Templo del Sol se distingue por poseer la crestería mejor conservada de todo el sitio, con más de 4 metros de altura y en su interior se encuentra el tablero del Sol, tallado en piedra caliza. El Templo de la Cruz, es el más alto del conjunto. La entrada al recinto está flanqueada por dos lápidas labradas que representan a dos hombre ricamente ataviados: el primero se supone que es el gobernante Jaguar Serpiente, y el segundo una deidad del inframundo. En la cima de un pequeño cerro, levantaron el Templo de la Cruz Foliada, cuya fachada delantera y la crestaría se derrumbaron por completo.

Saliendo de la plaza, rumbo al norte, se encuentra el Grupo Norte.

Está conformado por cinco edificios alineados sobre un mismo basamento. Al oeste, se observa el Templo del Conde, un basamento de cinco cuerpos. En la cúspide se encuentra un pequeño templo que conserva gran parte de su arquitectura original, excepto la crestería. En este lugar se encontraron varias tumbas con sus ofrendas casi completas. Entre los más recientes hallazgos, destaca el del Templo XIX, un trono decorado con dos tableros esculpidos.

Durante su visita, debe conocer el Museo de sitio que lleva el nombre del ilustre arqueólogo Alberto Ruz Lhuillier, descubridor de la Tumba de Pakal II.

Se podrán apreciar lápidas labradas, figuras de estuco y cerámica, portaincensarios, así como joyas de obsidiana, jade y concha, todas estas piezas pertenecen a material rescatado de la zona arqueológica de Palenque. En el 2007 fue inaugurada una réplica de la cámara funeraria y el sarcófago de Pakal, con la intención de salvaguardar el monumento original que se encuentra en el Templo de las Inscripciones. Al sobrevolar Palenque el viajero ve una ciudad abandonada, una ciudad que se diría que nunca fue habitada por seres humanos. Ve pirámides y plazas desmesuradas cubiertas por la selva hace 1.000 años. Las copas uniformes de los árboles abrazan las pirámides que asoman sus cabezas de musgo. Algunos consejos útiles en tu visita Calzado

Lleva calzado cómodo, preferiblemente deportivo, pantalón largo de preferencia de algodón, camisa de manga larga, así como un paliacate o sombrero.

Recuerda que estarás dentro de la selva, y deberás traer repelente de mosquitos. El Tiempo

Antes de llegar infórmate sobre las condiciones meteorológicas y elige el mejor momento.

Respeta

Recuerda la importancia de respetar y mantener limpio y en condiciones, el espacio que estás visitando.

Cómo llegar

En la parte norte del Estado, localizada en la región Selva, se encuentra la ciudad de Palenque, a la que se puede llegar utilizando las carreteras 190 y 199 en un recorrido de aproximadamente 6 horas, partiendo de Tuxtla Gutiérrez, la Capital del Estado.