En el siglo XVI, los ataques de los indÃgenas chichimecas a las caravanas que trasladaban textiles, carnes, ganado y granos, desde la región del BajÃo a las minas de Zacatecas, eran cosa de todos los dÃas. Las autoridades virreinales resolvieron entonces, fundar una población de resguardo justo en ese lugar, donde aparecÃa un manantial de aguas termales. Por lo tanto, en 1575 se fundó Villa de la Asunción, con algunos colonos acompañados de sus familias y un presidio con pocos soldados. No obstante, tal medida no resolvió el problema.
Por el hecho de que los acosos chichimecas prosiguieron, este Aguascalientes incipiente estuvo cerca de ser abandonado por completo. Se sabe que en 1584, en aquel pequeño caserÃo, solo quedaban 17 soldados y un par de colonos. Sin embargo, con el tiempo, la paz llegó a la región y esta pequeña comunidad prosperó a final de cuentas. En los cerros de las inmediaciones, surgieron entonces varias haciendas y el presidio del lugar, en 1611, fue nombrado como la? Villa de Nuestra Señora de la Asunción de las Aguascalientes?. Este último lugar fue creciendo en tamaño y relevancia. Con el paso de los siglos, se fue transformando en una enorme ciudad, abundante en casonas, plazas de grandes dimensiones y hermosas iglesias.
En la actualidad, se puede aprovechar en términos turÃsticos toda esta riqueza histórica y patrimonial en la ciudad de Aguascalientes. Lo primero, al visitarla, es conocer la gran Catedral BasÃlica, finalizada en 1738. Posteriormente, lo que toca es la Plaza de Armas, denominada también como Plaza de la Patria. Esta última exhibe en su centro, una célebre columna conocida como Exedra, misma que se distingue por tener en lo más alto, un águila con una serpiente.
Imperdible también resulta la construcción, que en tiempos virreinales fue la casa de la familia Rincón Gallardo, una de las más poderosas de la zona. En la actualidad, es la sede del Palacio de Gobierno de la Ciudad de Aguascalientes. Otros edificios importantes de la capital hidrocálida son: el Archivo Histórico del Estado, el Centro INAH y el vistoso Templo de San Antonio de Padua, en las cercanÃas del Museo de Aguascalientes. No lejos de allà aparece el Gran Hotel Alameda, una admirable construcción de 1899, la cual, en cierto momento, estuvo integrada a la Hacienda de Ojo Caliente. Esta última se hallaba frente a los manantiales, de donde se derivó el nombre de la ciudad.
En el centro de esta urbe provincial, justo en la parte norte de la Plaza de la Patria, destaca el Hotel Imperial, mismo que ocupa el terreno donde se hallaba aquel presidio del siglo XVI de la antigua Villa de la Asunción. Se dice que en el interior del Hotel Imperial, se preservan vestigios de viejas construcciones militares.
Deja un Comentario sobre No te pierdas estos atractivos turÃsticos de Aguascalientes