El Programa de los 177 Pueblos Mágicos de Mexico, desarrollado por la Secretaría de Turismo en colaboración con diversas instancias gubernamentales y gobiernos estatales y municipales, contribuye a revalorar a un conjunto de poblaciones del país que siempre han estado en el imaginario colectivo de la nación en su conjunto y que representan alternativas frescas y diferentes para los visitantes nacionales y extranjeros. Más que un rescate, es un reconocimiento a quienes habitan esos hermosos lugares de la geografía mexicana y han sabido guardar para todos, la riqueza cultural e histórica que encierran.

No debes dejar de visitar el pueblo mágico de Pinos en Zacatecas

Nota sobre No debes dejar de visitar el pueblo mágico de Pinos en Zacatecas
Pinos fue fundado el 12 de febrero de 1594 bajo el nombre de "Real de Nuestra Señora de la Purísima Concepción de Cuzco y Descubrimiento de Minas que llaman de la Sierra de Pinos" y formaba una etapa importante del Camino Real de Tierra Adentro, conectando la Ciudad de México con Santa Fe.

Su nombre actual se debe a los bosques que cubrían la sierra y cuya madera fue usada en la fundición de los metales.

Se localiza en el estado de Zacatecas dentro del desierto del Gran Tunal. En 2010 cuenta con una población de 8.000 habitantes y se encuentra dividido en 3 barrios; Centro, La Cuadrilla, y Tlaxcala.

El Gran Tunal, solía ser el hogar de los huachichiles, y se caracteriza por una escasa vegetación de altos yucas y espinosos matorrales además de grandes llanuras, de las cuales emergen alguna mesetas rocosas.

En el este del triángulo delimitado por las capitales de los tres estados, se encuentra la Sierra de Pinos, y en una de sus laderas, el pueblo del mismo nombre, construido en el lugar donde fueron descubiertas las primeras minas de oro y plata, a unos 2700 metros de altura. CENTRO

Concentra los principales monumentos alrededor de tres jardines: la Plaza de Armas, el Jardín de las Flores y el Jardín Benito Juárez.

En el lado norte de la Plaza de Armas se encuentra ocupado por el templo y el convento de San Francisco. El templo alberga la imagen religiosa más venerada de la región, mejor conocido como "Nuestro Padre Jesús". El patio del convento ha sido objeto de una restauración cuidadosa en la cual, las pinturas de los arcos y de las columnas han sido reconstituidas con los mismos pigmentos naturales utilizados por los artistas indígenas del siglo XVII.

Le hace frente del otro lado de la Plaza la parroquia de San Matías, cuya edificación empezada al final de siglo XVII nunca fue concluida.

Presenta detalles arquitectónicos interesantes tales como una fachada barroca de piedra rojiza y esculturas de personajes y animales fantásticos hechos de "piedras rejoneadas" en sus paredes exteriores. El jardín de las Flores concentra el mayor número de construcciones con portones porfirianos.