El Programa de los 177 Pueblos Mágicos de Mexico, desarrollado por la Secretaría de Turismo en colaboración con diversas instancias gubernamentales y gobiernos estatales y municipales, contribuye a revalorar a un conjunto de poblaciones del país que siempre han estado en el imaginario colectivo de la nación en su conjunto y que representan alternativas frescas y diferentes para los visitantes nacionales y extranjeros. Más que un rescate, es un reconocimiento a quienes habitan esos hermosos lugares de la geografía mexicana y han sabido guardar para todos, la riqueza cultural e histórica que encierran.

Qué puedo visitar en los Pueblos de Michoacán

Nota sobre Qué puedo visitar en los Pueblos de Michoacán

{En los viajes que se realicen al territorio michoacano no hay que perderse la opción de visitar el Santuario de la Mariposa Monarca.

Es una zona silvestre con abundantes bosques de oyamel, en los cuales se presenta uno de los fenómenos naturales más impresionantes del orbe: el arribo de las mariposas monarcas, las cuales llegan de las áreas boscosas de Estados Unidos y Canadá.}

Estos insectos pasan el periodo invernal en los bosques michoacanos tras recorrer cerca de 5 mil kilómetros en busca de temperaturas más elevadas.

Otro lugar mágico en los pueblos michoacanos es Pátzcuaro. Esta comunidad de pintoresco ambiente, integrada al programa de los Pueblos Mágicos de México, es un caudal inagotable de edificios históricos, construcciones sacras, monumentos y plazas.

Cabe mencionar que en los tiempos prehispánicos Pátzcuaro estuvo considerado como uno de los centros ceremoniales de mayor relevancia para los indígenas purépechas y otras etnias de la región.

Muchas tradiciones y usanzas de vida se han preservado desde entonces.

Es fascinante observar a los pescadores locales manejar sus redes con forma de ala de mariposa, las cuales usan para capturar al rico pescado blanco.

Este último es un frecuente ingrediente de populares platillos de la cocina regional.

Un lugar ubicado a unos veinte minutos de Pátzcuaro es Janitzio.

Se trata de una isla de pequeño tamaño en cuya zona más elevada se encuentra un monumento de 40 metros de altura en honor de José María Morelos y Pavón.

Los lugareños han sabido preservar valiosas tradiciones y costumbres heredadas por los indígenas del lugar.

Una muestra de lo anterior es la llamada Noche de Muertos, misma que se realiza en los últimos días de octubre e inicios de noviembre. Durante este periodo del año la isla es ornamentada y el ambiente se llena de un gran misticismo. Además, los pescadores locales navegan con sus redes de mariposa y sus embarcaciones repletas de velas.

Otro sitio de gran belleza por estos rumbos de México es el Lago de Zirahuén.

En este lugar de especial pureza silvestre, localizado a media hora de Pátzcuaro, se puede practicar la navegación en kayak o en lancha. En los cerros que rodean a este cuerpo de agua, bastante más pequeño que el lago de Pátzcuaro, se ubican restaurantes de rústico estilo y con espectaculares panorámicas.