El Programa de los 177 Pueblos Mágicos de Mexico, desarrollado por la Secretaría de Turismo en colaboración con diversas instancias gubernamentales y gobiernos estatales y municipales, contribuye a revalorar a un conjunto de poblaciones del país que siempre han estado en el imaginario colectivo de la nación en su conjunto y que representan alternativas frescas y diferentes para los visitantes nacionales y extranjeros. Más que un rescate, es un reconocimiento a quienes habitan esos hermosos lugares de la geografía mexicana y han sabido guardar para todos, la riqueza cultural e histórica que encierran.

Prerpara un viaje familiar a Valle de Guadalupe, Baja California

Nota sobre Prerpara un viaje familiar a Valle de Guadalupe, Baja California

El Valle de Guadalupe es una región del estado de Baja California, dedicada esencialmente a las labores vitivinícolas.

A veces se le nombra de manera desacertada como Valle de Calafia, en una tentativa por promover lo que se produce en tal región a nivel nacional y mundial. No obstante, la denominación correcta de esta área es Valle de Guadalupe, por la Misión de Nuestra Señora de Guadalupe que allí establecieran los franciscanos, en una de las mesetas del lugar. Los indígenas locales destruyeron tal misión en 1840.

El Valle de Guadalupe comprende varias poblaciones como Francisco Zarco, El Porvenir y San Antonio de Las Minas.

En los comienzos del siglo XX, el presidente Díaz concedió una concesión a un grupo de familias rusas llegadas del territorio estadounidense, en lo que actualmente es Francisco Zarco, pero a finales de la década de 1950. mexicanos provenientes de Mexicali se asentaron en el lugar para recuperar la población que puede visitarse en nuestros días.

El Valle de Guadalupe es equivalente en extensión al Napa Valley de los Estados Unidos y tiene un clima similar al del suroeste de Francia.

Se trata de un lugar de enorme atractivo turístico por estar integrada a la famosa Ruta del Vino en el territorio bajacaliforniano. Ofrece a los visitantes sitios de gran interés, como por ejemplo, museos, viñedos, restaurantes, casas vinícolas y cautivantes hoteles boutique.

Estamos ante un sitio muy apacible, de estilo campirano, especialmente cautivador para los aficionados a la vitivinicultura y la gastronomía.

De hecho en Valle de Guadalupe se ubica el único museo acerca del vino en todo el territorio nacional. Los viajeros pueden contratar tours que los llevan a visitar las Casas Vinícolas más importantes de nuestro país, como es el caso de Bodegas de Santo Tomás, Casa Pedro Domecq y L.A. Cetto. Pero además, la gastronomía y los productos regionales son también imprescindibles de conocer, en lugares como Las Cavas de Quesos, Sol y Barro y la Casa de Doña Lupe.

Realizar actividades de turismo gastronómico en Valle de Guadalupe, nos ofrece la ocasión de saborear rico pan horneado, quesos suculentos, salsas, mermeladas, aceitunas, hierbas aromáticas y otros interesantes alimentos.

Hay restaurantes para todas las preferencias cuilinarias y en cuanto a los hoteles, la oferta también es sumamente variada.

En Valle de Guadalupe es posible hallar desde sencillas cabañas hasta sugestivos hoteles boutique y hoteles de diseño, localizados en un ambiente de hermosos viñedos.