El Programa de los 177 Pueblos Mágicos de Mexico, desarrollado por la Secretaría de Turismo en colaboración con diversas instancias gubernamentales y gobiernos estatales y municipales, contribuye a revalorar a un conjunto de poblaciones del país que siempre han estado en el imaginario colectivo de la nación en su conjunto y que representan alternativas frescas y diferentes para los visitantes nacionales y extranjeros. Más que un rescate, es un reconocimiento a quienes habitan esos hermosos lugares de la geografía mexicana y han sabido guardar para todos, la riqueza cultural e histórica que encierran.

Deléitate con una aromática y hermosa aventura por la Ruta del Cacao

Nota sobre Deléitate con una aromática y hermosa aventura por la Ruta del Cacao

Tabasco es patria del cacao, semilla que transformó al mundo convertida en chocolate.

Es posible deleitarse con una deliciosa y aromática aventura al recorrer la ruta del cacao en la que viven Mayas–Chontales y conocer sitios arqueológicos, antiguas haciendas cacaoteras, lagunas y playas de gran belleza.

La Ruta del Cacao, es uno de los recorridos turísticos más atractivos que tiene este estado del sureste de México.

Tabasco es la patria del cacao.

Una semilla que surgió de la región de la Chontalpa, cultivada por los mayas, para que hoy el mundo la consuma en chocolate y lo elabore en cientos de formas y modalidades.

Estas tres casas producen por separado aproximadamente de tres a cuatro toneladas de chocolate al mes.

El 60% del producto se exporta a Estados Unidos, España, Alemania y Francia, 40% restante se consume en Tabasco, Chiapas y Oaxaca. La Ruta del Cacao cubre las siguientes zonas del edén tabasqueño: Nacajuca

En esta población los habitantes hablan maya–chontal, elaboran espectaculares artesanías de palma, junco y guano, así como coloridos bordados.

Aquí resulta interesante visitar la Plaza Artesanal y el Templo de San Antonio de Padua, de estilo gótico. Otro atractivo que no debe dejar de visitar es el Centro Reproductor de tortugas de agua dulce, único en Latinoamérica con siete especies endémicas, y los interesantes camellones chontales, donde puede realizar paseos en lancha. Jalpa de Méndez

Vale la pena hacer una parada en este bello municipio para conocer las artesanías de jícaras y visitar la casa–museo Coronel Gregorio Méndez, el Templo de San Francisco de Asís, cuya fachada es de estilo Neoclásico, y finalmente admirar las bellezas naturales de los humedales Pomposú–Julivá.

Cupilco

Este enigmático pueblo sirvió como frontera de intercambio comercial entre los Mayas y los Aztecas.

Además, la más pintoresca iglesia de Tabasco se encuentra en esta población, su fachada está pintada de brillantes colores, en el interior hay dos retablos, uno de ellos, el de la Virgen de la Asunción, a quién esta dedicado este templo. Zona Arqueológica de Comalcalco

Única ciudad Maya en Mesoamérica construida con ladrillos de barro cocido.

Se originó a finales del período clásico. Tres grupos arquitectónicos están comprendidos en el área principal de Comalcalco: Plaza Norte, Gran Acrópolis y Acrópolis Este.

Las Haciendas cacaoteras pueden ser visitadas para observar las plantaciones del cacao y ser testigos de la elaboración del exquisito chocolate tabasqueño, disfrutando de los colores y aromas de una gran variedad de plantas y árboles exóticos.

Algunas haciendas son: Hacienda Jesús María

Al entrar a la hacienda Jesús María, de inmediato se percibe en el ambiente el olor a chocolate.

Con ese rico aroma el tour inicia. Justo a la sombra de un árbol de cacao espera Rafael Arévalo, quien ha trabajado desde niño en esta tierra. Ahora es gerente de Chocolates Cacep, los cuales se elaboran dentro de esta hacienda.

“El proceso del cacao es todo un arte y hay que ser muy pacientes, ya que de cada 10 mil flores que da el árbol del cacao, sólo 1% llega a ser polinizada y de esa cifra únicamente 1% se convierte en mazorca madura”.

Los estados que poseen cosecha de cacao en México son Tabasco, con 75% de la producción nacional, en la zona de la Chontalpa, y Chiapas, con 25% en el área del Soconusco.

“De cada árbol sólo se cosechan 20 mazorcas, mismas que tardan de cuatro a seis meses en convertirse en fruto maduro.

El proceso está integrado por recolección, fermentación, lavado y secado del grano. Posteriormente se pasa a la molienda de los granos, se añade azúcar y canela y se saca en una pasta o ‘conchado’. Después esa mezcla se lleva a moldes para que sean guardados en una cámara de refrigeración”, explica Arévalo.

En esta hacienda trabajan 32 personas, quienes producen dos toneladas de cacao a la semana y venden casi 300 kilos de chocolate al público.

Hacienda La Luz

La hacienda La Luz es una de las más importantes de la región, por contar en sus 50 hectáreas de extensión.

En este espacio es posible encontrar un vivero que tiene heliconias, jengibres, árboles de tamarindo, mango, castañas, vainilla, canela y hule, además 26 plantíos de cacao, un museo del chocolate, cinco hectáreas de selva virgen y una pequeña fábrica para producir el cacao y convertirlo en deliciosos postres.

Entre los lugareños, la hacienda La Luz es conocida como hacienda Wolter, en honor al doctor Otto Wolter Hayer, inmigrante alemán que la adquirió a principios de la década de los 30 y la convirtió en una de las primeras haciendas que industrializaron el cacao.

Finca Cholula

Esta finca cuenta con 12 hectáreas de cacao y 14 hectáreas de pastizal.

Su ubicación queda a unos kilómetros de la zona arqueológica de Comalcalco. Al igual que la hacienda La Luz y Jesús María, en la finca Cholula se produce chocolate artesanal. Su especialidad es aprovechar la cáscara del cacao como abono orgánico.