El Programa de los 177 Pueblos Mágicos de Mexico, desarrollado por la Secretaría de Turismo en colaboración con diversas instancias gubernamentales y gobiernos estatales y municipales, contribuye a revalorar a un conjunto de poblaciones del país que siempre han estado en el imaginario colectivo de la nación en su conjunto y que representan alternativas frescas y diferentes para los visitantes nacionales y extranjeros. Más que un rescate, es un reconocimiento a quienes habitan esos hermosos lugares de la geografía mexicana y han sabido guardar para todos, la riqueza cultural e histórica que encierran.

Conoce Zacatecas

Nota sobre Conoce Zacatecas

Localizado en la mesa del norte, en medio de las dos más grandes cordilleras mexicanas, Zacatecas es una de las piezas más hermosas del mosaico que conforman México, y uno de los lugares más atractivos para visitarse.

Su diversidad de lugares ofrece una experiencia fascinante para todo viajero, garantizando su diversión, recreación y esparcimiento, en un acogimiento de tradicional hospitalidad. Su ciudad capital del mismo nombre ofrece la experiencia de vivir una época pasada, perpetuada en un eterno presente en donde el tiempo se ha quedado contenido en la magia de sus edificios y en sus serpenteadas callejuelas.

Conocer Zacatecas es descubrir la transfiguración de la plata convertida en bella arquitectura.

Zacatecas es un real ejemplo de tradición y vocación cultural, un lugar donde se vive la historia palpitante a través del arte de sus museos, de su arquitectura y de sus tradiciones. Por su historia y presencia, Zacatecas consolida su categoría de ciudad colonial y moderna, proporcionando una de las pautas más importantes para entender el desarrollo del norte de México. Un original lugar, pletórico de cosas novedosas, mostradas en valiosos estuches.

El área se encontraba poblada por indígenas zacatecos desde siglos antes de la llegada de los españoles.

En el Siglo XVI tras la llegada de los conquistadores se descubrieron los ricos yacimientos de plata que llevaron al asentamiento definitivo; su fundación se asume que ocurrió el 8 de septiembre de 1546. Juan de Tolosa encabezaba a los pioneros europeos entre quienes además figuraban Baltazar Temiño de Bañuelos, Cristóbal de Oñate y Diego de Ibarra. Sin embargo suele considerarse que el hecho ocurrió en 1548.

La riqueza de las minas impulsó un rápido crecimiento sin seguir los cánones urbanos renacentistas en buena medida por la complicada topografía local; En 1585 recibió el título de "Muy Noble y Leal Ciudad de Nuestra Señora de Zacatecas" por parte del rey de España Felipe II, mismo que en 1588 le dotó de su escudo de armas.

En la ciudad se asentaron las más diversas órdenes religiosas que fundaron templos y conventos, además de servir de base, junto con la localidad de Guadalupe, a la evangelización del norte del Virreinato de la Nueva España.

Al consumarse la Independencia de México se erigió el Estado de Zacatecas con capital en la ciudad homónima. Francisco García Salinas, un destacado gobernador, defendió el federalismo en una época de agrias pugnas por establecer en México un régimen imperial o uno republicano. La ciudad vivió también los numerosos conflictos del Siglo XIX, tales como las guerras contra Estados Unidos y Francia, la Guerra de Reforma y la restauración de la República. También se vio beneficiada con el ferrocarril en 1884, estación en la vía Ciudad de México - Paso del Norte, desde 1888 Ciudad Juárez, Chihuahua.

La ciudad de Zacatecas hizo historia en la Revolución Mexicana con la Toma de Zacatecas, importante batalla librada el 23 de junio de 1914 cuando Francisco Villa y su tropa, conocida como Los Dorados, entre ellos Felipe Ángeles y Pánfilo Natera, la tomaron en un día combatiendo contra el ejército de Victoriano Huerta.

Con esta histórica batalla se definió en buena medida el destino del país. No obstante el golpe a la economía local fue contundente y sumado a la baja en los precios de los minerales, Zacatecas vivió décadas de acentuada recesión económica. Paradójicamente la depresión económica significó la salvación de su patrimonio histórico, dada la escasa construcción.

Promulgándose posteriormente las disposiciones legales que protegen las construcciones del centro histórico.

Durante el siglo XX la actividad minera disminuyó su magnitud tanto por el agotamiento de los yacimientos, como por los precios internacionales de la plata y otros minerales; lo que ha llevado a la economía local hacia otras actividades como el comercio y servicios, en especial administración pública, educación y turismo.

En diciembre de 1993 la Unesco dio a Zacatecas el reconocimiento de Patrimonio Cultural de la Humanidad.

Hoy Zacatecas, como capital del estado, consolida su categoría de ciudad colonial y moderna, su historia y presencia regional proporciona una de las pautas más importantes para entender el desarrollo del norte de México.